En la entrada anterior hice mención a episodios que se ha repetido desde tiempo inmemorial. Estoy hablando del fenómeno de las conquistas con sus más y sus menos.
Conquistas: Lo que destruyen y aportan.
Para los que han tenido claro que me refería a la conquista de América tengo que sacaros del error. No es América. Me estoy refiriendo a la conquista de la península ibérica, hace unos 2.200 años, por parte de Roma, uno de los imperios más importante del mundo antiguo. Los datos que aparecen en la entrada anterior los recopilé cuando empecé a escribir sobre la conquista romana para el libro que estoy preparando. No hace falta que os diga cuanto se parece a lo que se ha percibido y se sigue percibiendo como conquista de América.
Sí, la verdad es que es para «alucinar», pero a pesar de que parece que la Historia se repite, yo diría que es el ser humano el que se «repite» hasta la saciedad, por no decir la estupidez humana; pero para bien o para mal somos hijos de nuestro tiempo. Los romanos lo eran y los «españoles»* también.
Aspectos comunes de la conquista de América.
Hay que hacer matizaciones ya que los 1.500 años que separan a una conquista de otra no fueron en balde. La mayoría de los pueblos que se encontraron los europeos en América estaban en el Neolítico: 9.000 años de evolución les separaba. ¿Qué podían hacer frente a la superioridad militar europea? Por no hablar de las epidemias que se llevaron al 90% de la población indígena.
Se ha añadido mucha fantasía, sobre todo desde 1.992 a la idea de la Conquista, la más común es la de «Encuentro entre dos mundos». No fue un encuentro ya que los encuentros suelen ser pacíficos y de intercambio; dando lugar a procesos de aculturación como por ejemplo pasó con los fenicios o los griegos en la península ibérica en el primer milenio antes de Cristo.
En cambio en lo que se refiere América, efectivamente no fue pacífico aunque se produjeron muchos escenarios. Siempre hay que matizar. La monarquía hispánica estaba en expansión y al toparse con América, ésta cayó en su rádar. Hubo destrucción pero también aportación.
«No hubo ni vencedores ni vencidos, solo el doloroso nacer del pueblo mestizo.»
En la plaza de la tres culturas en México hay una placa escrita por Novo y en la que en algún momento dice,» se libró una última batalla en la que no hubo ni vencedores ni vencidos, solo el doloroso nacer del pueblo mestizo» que es México hoy. Nació algo nuevo. Algo que no existiría sin esas condiciones.
Me viene a la cabeza la conquista de Hispania. Roma se encontró con la península, tarde o temprano tendría que ocurrir, pero ocurrió gracias a Cartago y las guerras púnicas.
200 años tardaron en conquistarla. ¿Qué ocurrió? Pues la destrucción sistemática de todo el mundo indígena que por allí habitaban, más de 50 pueblos con sus lenguas y culturas. Más evolucionadas o menos. Tenemos los iberos, los distintos pueblos celtas, los celtíberos…todos sucumbieron. De Hispania se llevaron oro, plata, mercurio y esclavos; lo transformaron todo… Aparecieron con sus obras de ingeniería, sus caminos, sus templos, sus magníficas ciudades de nueva planta…
Y al igual que ocurriría en nueva España 1.500 años después, surgió algo nuevo: Hispania…y empezamos a asumirnos como algo diferente desde ahí.
Las conquistas son siempre iguales. Destrucción material, pero sobre todo de vida humana y también construcción de algo nuevo. Aunque esto no siempre. Ha habido invasiones que solo aportaron destrucción.
Yo diría que la gran diferencia con respecto a otros momentos en la historia es la gran impopularidad que arrastran hoy en día.
Ya no se considera que haya causas justas para iniciarlas, ninguna justificación es válida. En esto parece haber habido un gran avance en la conciencia humana. Hoy en día la única conquista que aceptamos de buena gana es la del Espacio. Sigamos así.
*Bueno, en realidad no eran españoles (el concepto de español como hoy manejamos no existía), eran en su mayoría castellanos y de otras nacionalidades.
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Enlace a la magnífica conferencia del profesor Solomas Rios en la fundación Carlos Slim de México
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